Romanze Criminale

En la Roma de los años 70, tres jóvenes delincuentes, El Libanés, Freddo y Dandy, se asocian con una banda criminal para raptar y asesinar a un poderoso empresario. Así nace la "Banda Magliana", una organización cuyo objetivo es controlar a políticos y millonarios de la ciudad, al mismo tiempo que se lucran con el negocio de la heroína. Cuando las fuerzas de seguridad se enteran de su existencia, no le dan mucha importancia, pero el comisario Scialoja es consciente del peligro real de la banda.



Basada en la novela de Giancarlo De Cataldo, "Romanzo criminale" repasa una de las épocas más convulsas de la historia italiana, a través de una de las muchas organizaciones terroristas que actuaban en los 70, "Banda Magliana". Su director, el también actor Michele Placido (La desconocida), va de la acción a la emotividad, utilizando el primer plano para presentarnos la complejidad psicológica de los protagonistas. La película compitió en la Berlinale 2006, siendo ese año una de las triunfadoras de los David de Donatello con siete galardones.

Kim Rossi Stuart (Líbero) da vida a Freddo, mientras que Claudio Santamaria (Melissa P.) y el ganador de un David de Donatello, Pierfrancesco Favino (El último beso), son sus compinches en la gran pantalla. Otro de los importantes es Stefano Accorsi (No basta una vida), encargado de poner rostro al comisario Scialoja, y Anna Mouglalis (Gracias por el chocolate) que interpreta a una atractiva mujer que cruzará los destinos de Scialoja y Dandy, uno de los miembros más activos de la banda.



MICHELE PLACIDO FIRMA SU MEJOR PELÍCULA CON UN POTENTE Y LÚCIDO RETRATO CORAL DEL MEDIANO CRIMEN ORGANIZADO EN LA CONVULSA ROMA DE LOS AÑOS 70

Con tres interminables años de retraso toma tierra en la cartelera nacional el que es uno de los filmes más potentes (al menos hasta este 2008 prodigioso de "Gomorra" y "Il divo") facturado en la vecina Italia en el último lustro. Planteado como un verdadero quién es quién del cine transalpino, la última propuesta de Michele Placido presume de uno de los mejores repartos habidos y por haber en la historia reciente del cine italiano. Y como cine de personajes que es semejante apuesta no puede sino saldarse con un balance positivo. Kim Rossi Stuart, el superlativo Elio Germano, Riccardo Scamarcio, Stegfano Accorsi o Jasmine Trinca son la flor y nata del cine italiano sub-40, y aquí encuentran un vehículo impagable para exhibir la excelente salud de las nuevas hornadas de intérpretes italianos.

Un recital polifónico que da vida y oxígeno a un contundente fresco de ecos históricos de la mediana delincuencia en la Roma de los años 70 siguiendo los pasos de las grandes sagas criminales y corales del cine norteamericano. Placido, que adapta con precisión quirúrgica la excelente novela homónima de Giancarlo De Cataldo procediendo con entre trazos perfectamente firmes a dibujar el auge y caída a los infiernos de un hatajo de maleantes, de parásitos sociales de las malas calles perfilados con vívida intensidad en toda su dimensión psicológica. "Romanzo criminale" es una película ambiciosa que se esmera, y mucho, en la reconstrucción ambiental de un país sacudido por violentas convulsiones político-sociales, tomando así el testigo de otras películas italianas que explotan ese filón contextual como "La mejor juventud" o "Mi hermano es hijo único".



Dura, extraordinariamente seca y sin concesión alguna a sentimentalismos de saldo, la propuesta de Placido llega casi tan lejos como su director se propone. Los personajes no son juzgados y sus cuestionables acciones desfilan ante nuestros ojos desde la objetividad de la equidistancia. Pesan francamente las dos horas y media largas de metraje (de hecho existe una versión alternativa y extendida de 180 minutos), pero a pesar de puntuales altibajos, lastre de la excesiva dilatación del metraje, "Romanzo criminale" encierra una ración bien pertrechada de buen cine, vendible además entre las masas y entre el público amante del cine pequeño y minoritario.

Roberto Piorno